11-02-2010, curiosidad:
Ni los detalles más irrisorios del mundo son fruto de la casualidad. Ni los colores de los semáforos, ni los tamaños de los folios... ni siquiera la forma de las alcantarillas. Seguramente no os lo habíais preguntado nunca -porque realmente parece algo arbitrario- pero... ¿sabíais que hay un motivo práctico por el que la mayoría de las alcantarillas son redondas? Imaginaos que la alcantarilla fuera, por ejemplo, cuadrada... Imaginad que levantáis la tapa (también cuadrada) justo sobre su hueco, la ponéis en posición vertical (siempre por encima de su propio hueco), y finalmente la giráis unos 45 grados... Vale, ahora dejadla caer... ¡¿Dónde ha ido la tapa?! Pues ni se sabe, porque muy probablemente la tapa se haya colado por la diagonal del hueco y haya caído hasta el subsuelo y más allá. Así que para que no suceda esto, para que ningún diámetro de la tapa pueda caber por ningún diámetro del hueco, la forma de ambos debe tener diámetro constante. Y la forma geométrica más sencilla que cumple esta característica es, efectivamente... la redonda lironda. Otra idea sencilla, y otro invento redondo. Pero atención, no es la circunferencia la única forma que cumple esta norma, también la cumplen todos los "polígonos de Reuleaux" (véase el ejemplo concreto del triángulo de Reuleaux y algunas alcantarillas con esta curiosa forma). (Fuente)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
tío, nunca dejarás de sorprenderme...
Publicar un comentario