14-10-2008, curiosidad:
Los atascos de bienvenida a la gran ciudad me generan siempre una gran curiosidad. Durante esos largos ratos de angustiosa espera, me he llegado a hacer muchas preguntas sobre el origen y el comportamiento de las colas. Por ejemplo: ¿por qué a veces, una vez se despeja el tráfico, no encuentras ningún motivo para el embotellamiento? Ni accidente, ni obras, ni pancarta de publicidad de ropa interior... nada. La respuesta está en que las colas de coches se comportan físicamente como sistemas de partículas en movimiento, donde pequeñas fluctuaciones de velocidad/densidad pueden provocar reacciones en cadena, que finalmente conducen -nunca mejor dicho- a un atasco. En carretera, estas fluctuaciones se conocen como "ondas de tráfico", y son las responsables de que una cola se pueda desplazar en el tiempo y en el espacio, perdurando horas después a kilómetros de la causa inicial. Este simulador muestra este fenómeno de una forma muy gráfica, y esta animación de una forma todavía más visual. Con un experimento real, unos japoneses demostraron el concepto de densidad crítica para una determinada carretera, la cual originará atascos invariablemente. Otros conceptos relacionados con cinética de fluidos viales pueden encontrarse en las obras de Lighthill, Whitham y Richards, y en este estudio correalizado por Alberto Foronda. PD: Por cierto, la base de los atascos es que entran en él muchos más vehículos de los que salen, porque tardan en arrancar mucho más que en frenar. Por eso, yo personalmente intento reaccionar muy rápido en una cola y arrancar tan rápido como lo haga mi vehículo de delante. Creo que si todos disminuyéramos nuestro tiempo de reacción, los atascos se diluirían mucho más rápido. En cambio, este camionero opina lo contrario, que si conduces suavemente por detrás de un embotellamiento, consigues que detrás de ti el atasco disminuya sensiblemente.
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